Eurostat publica un informe sobre el uso de las plataformas de economía colaborativa para la reserva de alojamientos turísticos. Según este análisis, España estaría por encima de la media europea en esta modalidad, solo por detrás de Luxemburgo, Irlanda, Malta y Reino Unido.
España está a la cabeza en Europa en el uso de plataformas digitales peer-to-peer (P2P) cuando se trata de buscar alojamiento para sus viajes personales. Es la principal conclusión que se extrae del último informe de Eurostat sobre el uso que los ciudadanos europeos hacen de la tecnología.
Con un 24% de los españoles reservando alojamientos de otros particulares online, nuestro país ocupa la posición número 5, solo por detrás de Luxemburgo (44%), Irlanda y Malta (26%) y Reino Unido (25%). Se sitúa así por delante de otros países de referencia como Francia o Alemania, y por encima de la media europea, que se sitúa en el 19%.
En este sentido, cabe destacar que los principales Estados consumidores de turismo en España llegan también a altos porcentajes de uso de estas nuevas formas de alojamiento. De los casi 83 millones de turistas extranjeros registrados en España en 2018, 18,5 millones procedían del Reino Unido, según datos del INE. Le siguieron, por orden de importancia, Alemania (donde el uso de estas plataformas P2P de alojamientos turísticos alcanza el 21%), Francia (21%), Italia (19%), Países Bajos (22%) y Bélgica (23%).
Estos datos confirman la relevancia que las plataformas de economía colaborativa están teniendo en el desarrollo y crecimiento del sector turístico en nuestro país, motor fundamental de nuestra economía. Amplían el abanico de opciones de cara al viajero, haciendo la oferta más flexible e innovadora, y aportan valor desde el punto de vista de la experiencia, que se vuelve más personalizada y diferencial.
En los destinos, la disponibilidad de otras formas de alojamiento permite incrementar la capacidad para atender picos de demanda asociados a acontecimientos puntuales (deportivos, culturales, sociales), pero también abrir nuevas oportunidades de alojamiento en áreas o núcleos urbanos que no están servidos por la oferta turística tradicional, con los beneficios que esto supone para las economías locales. De hecho, las plataformas P2P sacan al mercado recursos infrautilizados, con la aportación económica adicional que esto supone para sus propietarios y para la Hacienda Pública.
Los datos de Eurostat confirman, en definitiva, la importancia de seguir apoyando la economía colaborativa desde todos los planos y, especialmente, desde la perspectiva regulatoria. Es necesaria una actuación coordinada desde las administraciones locales, autonómicas y estatales para aprovechar al máximo los beneficios de estas plataformas digitales.