El pasado miércoles, Adigital asistió a la presentación de los planes de Digitalización de las Administraciones Públicas, Digitalización de las Pymes y Competencias Digitales del Gobierno. Los tres planes forman parte de la Agenda España Digital 2025 y dispondrán de una inversión total de 11.000 millones de euros.
El primero, el Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas 2021-2025, tiene el objetivo de dar un paso más en el desarrollo de una Administración digital que pueda responder de forma más ágil y efectiva a las necesidades de la ciudadanía. Si bien es cierto que nuestro país parte de una buena posición en cuanto a digitalización de la Administración, que le ha permitido avanzar en la gestión de los servicios públicos, reduciendo tiempos y costes, este Plan reconoce que la relación digital de la población con la Administración sigue siendo «transaccional, atomizada, generalista y no personalizada», lo que «dificulta el acceso a las políticas, ayudas y servicios públicos», especialmente por parte de los colectivos más vulnerables, y el acceso de las empresas y las pymes en particular a procedimientos de compra pública, subvenciones e información fiscal, entre otros. Para atajar estas deficiencias, este plan se marca tres ejes de actuación: la transformación digital de las Administración General del Estado, los proyectos de alto impacto en la Digitalización del Sector Público y, por último, la transformación digital y modernización del Ministerio de Política Territorial. Contempla un presupuesto de 2.600 millones de euros.
Por su parte, el Plan de Digitalización de PYMEs 2021-2025, prevé un presupuesto de 4.656 millones de euros que versarán en torno a cinco ejes: la digitalización básica para las PYMEs; el apoyo a la gestión del cambio; el impulso a la innovación disruptiva y el emprendimiento digital; el apoyo a la digitalización sectorial y, finalmente, políticas de coordinación, eficiencia y reformas. Esta propuesta se apoya sobre el reconocimiento de que, todavía hoy, las pymes, que representan el grueso del tejido productivo español y la mitad del empleo, siguen sin explotar el potencial de la digitalización. De hecho, continúan por debajo de la medica europea no solo en cuanto a la venta de productos y servicios online, sino también en el uso de servicios en la nube y el big data.
Por último, cabe destacar la apuesta por la capacitación digital de la población a través del Plan Nacional de Competencias Digitales. Este es, sin duda, el mayor reto que afronta nuestro país en materia de digitalización. Tal y como advierte el informe España Nación Digital, contamos con un buen nivel de desarrollo de las infraestructuras físicas y de acceso a la tecnología pero todavía tenemos que hacer frente a una importante brecha en su uso que solo puede subsanarse garantizando la alfabetización digital de la población. De ella depende no solo el acceso al empleo sino la participación plena de la ciudadanía en la vida social. Por eso, este plan contempla una inversión pública de 3.750 millones de euros y siete líneas de actuación: la capacitación digital de la ciudadanía; la lucha contra la brecha digital de género; la digitalización de la educación y desarrollo de las competencias digitales para el aprendizaje; la formación en competencias digitales a lo largo de la vida laboral; la formación en competencias digitales de las personas al servicio de la Administración Pública; el desarrollo de competencias digitales para las PYMEs y, a modo de cierre, el fomento de especialistas TIC.